Teniendo claro su objetivo de convertirse en la mayor estrella de cine de la historia, el gran triunfador empezó a protagonizar varias películas, dando el gran giro a su carrera con “Independence Day” (1996) y “Men in Black” (1997).
Desde entonces su carrera ha continuado remontando el vuelo, hasta encontrarse al mismo nivel que pesos pesados de Hollywood de su tiempo como Jim Carrey.
Estar entre los ganadores más prestigiosos de Hollywood no era suficiente para Smith, que afirma que nunca puede estar sentado quieto y tiene que estar siempre moviéndose hacia la perfección, tal y como asevera en una entrevista con Rolling Stone.
Sus canciones “Getting” Jiggy WitIt” y “Men in Black” allanaron el camino al éxito en la industria de la música, con su álbum “Big Willie Style” que fue disco de platino.
Hablando de su impulso para triunfar y nunca ser capaz de estarse quieto, Smith admite que él padece TDAH. En la misma entrevista con Rolling Stone, Smith dice:
“Yo era el graciosillo que siempre tenía problemas para prestar atención.”
“Hoy me diagnosticarían como un niño con TDAH.”
“Yo era un estudiante de notables cuando podía haber conseguido sobresalientes?clásico alumno de bajo rendimiento”
“Era duro para mí leer un libro entero en dos semanas.”
“¡Hoy en día me compro un libro y hago que alguien me lo lea en una grabación!”